Comunicación Politica Y Sus Repercusiones Sociales by Jorge Poveda - HTML preview

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ABASTRACTO.

COMENTARIO:

Cuando se trata, como en el caso del acontecimiento "A", de obtener un juicio, se suel distinguir entre el juicio objetivo qeu expresa el "índice de precios" que, por lo áridoy abstracto, no sensibiliza, ni niega a la razón, como sí lo hae el jicio que se fundamenta en lo que cada persona estima como "correcto", porqeu aunque sea superficial y errónea es tangible y, por lo tanto, impacta los sentimientos.

5.- PENETRACION Y DEFENSA

Para modifica una opinión ya formada sobre un acontecimiento "A", la persona que conoce hechos a argumentos que can en contra de la opinión que ha pensado o emitido, puede reaccionar en dos formas diferentes:

a)Si es permeable, puede escuchar, leer o ver interpretaciones diferentes que, al entrar en contradicción con su porpio universo de creencias (o su matriz mental), le crean dudas -fermento interior- y le hacen suavizar su reacción, o en casos extremos, cambiar su opinión primaria, no sin cierta lucha interior.

b)Si es refractaria su conciencia, se define de dos maneras: una no queriendo saber

"nada más" del asunto, o bien, tratando de olvidarlo para no tener que rectificar.

6.- POSIBILIDADES DE MODIFICACION

En general, la opinión pública colectiva es más "cerrada" que la opinión personal; pero puede modificarse cuando se producen movimientos en la opinión,lo que usualmente puede darse por parte de los llamados "indecisos" (personas preocupadas por la objetividad".

Los cambios en las corrientes de opinión pueden seguir dos patrones: a)Pueden modificarse lentamente en el transcurso del tiempo, pero tales cambios obedecen más al campo de las actitudes que al de las acciones.

b)Se requieren acontecimientos permanentes, y no aislados, secuenciales y profundos, para que la opinión pública "fija" tienda a cambiar, de allí que los cambios "bruscos"

suelen ser poco usuales.

7.- MINORIA DE LA OPINIÓN.

Una característica esencial de la opinión pública se refiere a la debilidad de los juicios, la que está sujeta a varias circunstancias:

a)Cuando se produce un conflicto de opinión, dividiendo en dos grandes bandos de un conglomerado social, los acontecimientos posteriores hacen posible un veredicto. Estos casos son raros, dado que las deformaciones se unen a la falla de la ninoría colectiva y provocan que una gran verdad pase como una gran mentira o viceversa.

b)Lo usual es que la opinión pública no posea una memoria muy fiel: se preocupa sen demasía por los asuntos de actualidad y deja rápidamente a los historiadores emitir veredictos sobre acontecimientos que ya no son de su interés.

c)Es muy difícil desengañar a la opinión pública una vez que su memoria ha fijado y deformado el acontecimiento "A".

D)Salvo algunos especialistas, que pueden descubrir la verdad en la maraña de mentiras ya "fijadas", se pueden esperar los cambios generacionales para que, al extinguirse la generación contemporánea con el acontecimiento "A", se forme una opinión histórica más apegada a la verdad.(23)

8.- LAS NOTICIAS Y LAS ENCUESTAS

El público,en conjunto, desea conocer más unas noticias que otras y la prensa, la radio y a televisión, son ls que se sitúan entre el público y los hechos para dar sobre éstos sus versiones, que son ofrecidas en forma de noticias. Esto es, los medios son, además,

"mediadores" sociales.

En esta relación hay entonces un doble juego. Por una parte, el informador tratará de complacer el "gusto" del informado porque así se garantiza ser leído (prensa escrita", escuchado (radio) ovisto (televisión); pero, a su vez, el informado se sentirá complacido y manifestará su preferencia al seleccionar, casi exclusivamente, aquello que le produce satisfacción.

Cabe advertir que, en la situación ideal, un informador srio y honesto nunca altera, al trasmitirlos al público, la realidad de los hechos.

En este juego se gesa la formación de opinión pública, lo que refuerza aun más su carácter subjetivo, pues se unen las características analizadas en el punto anterior y éstas, que son propias de los medios de información de masas.

Es precisamente ante esta situación, altamente subjetiva, cuando los propios medios pueden efectuar encuestas de opinión pública, para reforzar o debilitar ideas, corrientes o movimientos sociales diversos, por lo que es conveniente hacer un breve examen de la técnica de las encuestas de esta naturaleza, porque de ellas se desprende la posibilidad de ayudar o fijar como "verdades absolutas", lo que apenas son gustos o preferencias.

Por supuesto que ésta no es la situación, si lo que se busca, con criterio ético, es utilizarlas como instrumentos sociales de medición para permitir el equilibrio en la formación de juicios de opinión.

A) LA TECNICA DE LAS ENCUESTAS

Las encuestas de opinión tienen carcad de cincuenta años de haberse iniciado como técnicas para medir gustos y preferencias, y se fundamentan en la modalida de hacer cortes o muestras que se consideran representativas del universo objeto de consulta.

Su basamento interno descansa en la técnica matemática para la constitucón de la muestra y la determinación del porcentaje de error esperado, y en la técnica psicológica visible en la elaboración de los cuestionarios y en la forma de plantear las preguntas.

La empresa encargada de hacer una encuesta para medir el impacto, los sectores y edades acerca de un acontecimiento "X", se debe preocupar, con todo profesionalismo y objetividad científica, por aspectos metodológicos como: 1.-El control y la supervsión del trabajo de campo.

2.-El crce de información proveniente de los diversos equipos de encuestadores.

3.-Cerciorarse de que la muestra es realmente representativa del universo.

Pero siempre quedan -como preocupaciones- dos aspectos respecto a la validez de las encuestas como reflejo fiel de una verdad que no es fácilmente aprenhensible: 4.-El primero se relaciona con el hecho intrínseco de que la encuesta mide un estado de opinión en un momento dado, lo cual implica qeu la medición se aplica a juicios subjetivos, hacindo caso omiso de la dinámica en que estos ocurren.

5.-El segundo se relaciona con un aspecto extrínseco, y es que es aconsejable preferir estudios que sean encargados por diferentes usuarios, dado que si es un solo sector, grupo o empresa el que ordena la encuesta, es más fácil que se preste a manipulación o que se la uzgue dentro de esa prespectiva.

Como un aspecto relevante que puede aplicarse a los juicios de opinión, y por ende, a las encuestas, se ha acuñado el concepto conocido como el "Teorema de Thomas", cuya validez real depende de muchas circunstancias, el cual señala que no importa en dónde se encuentre la verdad respecto a un acontecimiento dado, pues, en última instancia, en el plano de las creencias sociales, la verdad es aquella que la mayoría califica como tal.

Este teorema demuestra que las llamadas "necedidades sentidas", calificadas por los expertos como secundarias, tienen -sin embargo- más importancia, en el momento de auscultarse opiniones, que las denominadas "necesidades reales o primarias", pero que no tienen esa catergoría si la población no las ha interiorizado como tales.

Por tal razón, las encuestas suelen reflajar la poca comprensión de la población de aspectos concretos, pese a su base científica o técnica, y, por el contrario, la excesiva importancia que se otorga a aspectos fundados en las creencias y juicios de valor que se asientan en la "matriz mental" de las personas y en esa subjetivad, al dinamizarse socialmente entra en relación directa con las fuentes del poder, para debilitarlo o reforzarlo.

B)LA OPINION PUBLICA Y EL PODER

Los entes de la sociedad políica no están legalmente obligados a dar cuentas de su gestión más que como un mecanismo formal, puesen realidad se les juzga por su rendimiento global; así como tampoco están obligados a actuar para su complacencia, pero lo cierto es qeue un equilibrio entre ambos procederes hace nacer la necesidad de comprender cómo se gesta la opinión pública para preocuparse por informarla, y mejor aun, por formarla lo más objetivamente posible, para que las decisiones electorales se asienten sobre bases más reales y no sobre prejuicios o suposiciones.

Toda información de arácter oficial, si permanece dentro delímites razonables, produce un balance con la información que s gesta en sectores privados. Aunque s debe partir del hecho, demostrado social y psicológicamente, de que el público es menos sensible a la información oficial, de la cual suele desconfiar por naturaleza, dado que la difusión proveniente de estos sectores suele verse como manifestación del más puro corte propagandístico.

No obstante que las maniestaciones privadas también suelen estar distorsionadas por su carga publicitaria, lo cierto es que son más del agrado del público, dado el tratamiento gráfico y visual que acompaña a este tipo de información.

Este aspecto de la presentación es de tal naturaleza importante, que se suele afirmar que

"la verdad entra por la vista", de lo que se infiere, empíricamente, que lo, que agrada por razones estéticas, puede ser también "sinónimo de verdad".

En estudios recientes se ha puesto en evidencia que hay tres mediadores entre la opinión pública y el poder, los cuales, de distinta manera, han ido modificándose para conservar cierta vigencia.

1.-Unode estos mediadores está constituido por las ideologías que actúan como formulismos dogmáticos y que parecen ir perdiendo vigencia por haber sido planteados enel siglo pasado, salvo que se flexibilicen y pragmaticen, con lo que, al corer el peligro de la homogenización, también tienden a extienguirse.

2.-Otro de esos intermediarios son los partidos políticos que, con o sin ideologías, actúan con mucho sectarismo, convirtiéndose en verdaderas "horcas caudinas" de la organización, que impide la expresión libre de voluntades; y su legitimidad parece estar en relación directa con ser cada vez "menos partidos" y cada vez más "canales de expresión de opinión pública", lo que crea otro tipo de "juego político", más democrático y de mayor democratización.

3.-Un tercer intermediario está constituido por los medios de información de masas, que reflejan los intereses de sectores específicos de la sociedad y que, para su vigencia comercial, en verdad no necesitan crear fórmulas más imaginativas para pasar de la unilateralidad informatica a la comunicación con retroacciones múltiples; aunque la sociedad, para un desarrollo armónico, śi necesita que se dé este obligado paso.

C)LA DIVISION DE PODERES

La democracia occidental descans sobre la denominada clásica división de poderes, que estima que el poder único y supremo tiene más ocasiones e provocar poblemas que beneficios, y prefiere un reparto que, aunque cada vez más ineficiente, puede, sin embargo, gracias al guego de las compensaciones, dar cierto equilibrio, evadiendo así la tentación del autoritarismo, innato en el ser humano.

En consonancia con esta división de poderes, los mecanismos para otorgar o subrogar el ejercicio del mando, son los procesos eleccionarios y, en donde existan, los emcanismos complementarios como el "referéndum", y el "plebiscito" o "la consulta estructurada", pero todos ellos son instrumentos que actúan en el mediano y largo plazo. Sin embargo, desde la aparición de la industria de la comunicación, a los tres poderes clásicos regulados se les han ido uniendo los medios informativos, que conforman, en la práctica, el cuarto poder, el cual no está regulado más que por las leyes del comercado comercial.

Lo paradójico es que, pese a que la renovación de la confianza para ejercer el poder descansa en las elecciones periódicas, que son las que legalmente autorizan o no para proseguir en el ejercicio del poder; a la vez el cuarto poder, no obstante su informalidad, pude deslegitimar, con base en el uso de encuestas, el poder que confiere legalmente la consulta electoral, como lo demuestran las investigaciones de Herinrich Oberrauter.(24)

COMENTARIO:

Ahora bien, si las encuestas deslegtiman, lo hacen con base en la recolección de opiniones individualizadas que -por la ténica del muestreo- representan el universo escogido, y resuta que tales opiniones se forjan, fundamentalmentes, con base en las noticias que reflejan juicios de opinión para calificar los acontecimientos.

Aunque este aspecto específico no está bien dilucidado, pues así como algunos estudiosos manifiestan que así ocurres siempre (Ley de los Efectos Máximos o del Efecto Total), lo cierto es que también otros señalan que los formadores de opinión pública no son únicamentae los medios de noticias, por lo que no se les debe achacar todas las culpas (Ley de los Efectos Mínimos), denominada también "Agenda Setting" o Fijación de Agenda).

Aunque en la actualidad la Ley del Efecto Total ha caído en el desuso o en el desdescrédito, también hay dudas razonables acerca de la forma en que opera en la decisión política la Ley de los Efectos Mínimos. Cabe advertir también que los investigadores europeos son aun menos abiertos a admitir, como suelen hacerlo los norteamericanos , que los medios no afectan el comportamiento e inciden en las decisiones y esta aparente contradicción se relaciona con los aspectos de lo sociopolítico, así como de corrientes y escuelas de pensamiento; prácticas de investigación y otros aspectos más relacionados con el entorno en eque se producen las investigaciones; sí como la propia utilidad (o uso práctico) de estas investigaciones.

La persistencia de esta duda -aún no dilucidada del todo por las comprobaciones empíricas -refleja, justamente, que si imperan las dudas, nace sin embargo la necesidad ineludible de que los flujos informativos sean balanceados, para que la opinión pública -

al consultársela por medio de encuestas- permita moverse entre parámetros más flexibles y variados, y se pueda romper así la característica lineal -secuencial de procesos informativos unilaterales.