Cuando la cresta de una onda golpea el valle de otra se cancelan mutuamente. Esto se llama “interferencia destructiva”. Puedes ver esto fácilmente cuando arrojas a un charco dos guijarros separados un poco entre sí y miras lo que pasa cuando se juntan las olitas. De modo que cuando enviamos ondas a través de una barrera con dos ranuras, obtenemos en la pantalla lo que se llama un “patrón de interferencia” así….
Las líneas brillantes en la pantalla revelan dónde se han unido entre sí las crestas de las ondas (interferencia constructiva) y han llegado a la pantalla. Los espacios oscuros entre ellas señalan dónde ha golpeado la cresta de una ola el valle de otra (interferencia destructiva) y se han cancelado las dos mutuamente, sin llegar nunca a la pantalla.
Así pues, cuando enviamos “partículas de materia”, como las canicas, a través de dos ranuras, obtenemos dos patrones definidos en la pantalla, similares a las ranuras a través de las que han pasado. Cuando enviamos “ondas” a través de dos ranuras, obtenemos un patrón de interferencia en la pantalla.
Bastante sencillo. Ahora vamos a intentar este experimento con electrones en vez de canicas….