11 Por tanto, pues, les envia Dios operacion de error, para que crean á la mentira;
12 Para que sean condenados todos los que no creyeron á la verdad, ántes consintieron á la iniquidad.
13 Mas nosotros debemos dar siempre gracias á Dios por vosotros, hermanosamados del Señor, de que Dios os haya escogido desde el principio para salud,por la santificacion del Espíritu y fé de la verdad: 14 A lo cual os llamó por nuestro Evangelio, para alcanzar la gloria de nuestro Señor Jesu-Cristo.
15 Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habeis aprendido, sea por palabra, ó por carta nuestra.
16 Y el mismo Señor nuestro Jesu-Cristo, y Dios y Padre nuestro, el cual nos amó, y [nos] dió consolacion eterna, y buena esperanza por gracia, 17 Consuele vuestros corazones, y os confirme en toda buena palabra y obra.
CAPITULO 3.
1 RESTA, hermanos, que oreis por nosotros, que la palabra del Señor corra y sea glorificada así como entre vosotros:
2 Y que seamos librados de hombres importunos y malos; porque no es de todos la fé.
3 Mas fiel es el Señor, que os confirmará y guardará de mal.
4 Y tenemos confianza de vosotros en el Señor, que haceis y haréis lo que os hemos mandado.
5 Y el Señor enderece vuestros corazones en el amor de Dios, y en la paciencia de Cristo.
6 Empero os denunciamos, hermanos, en el nombre de nuestro Señor Jesu-Cristo, que os aparteis de todo hermano que anduviere fuera de órden, y noconforme á la doctrina que recibieron de nosotros: 7 Porque vosotros mismos sabeis de que manera debeis imitarnos: porque no anduvimos desordenadamente entre vosotros,
8 Ni comimos el pan de ninguno de balde; ántes obrando con trabajo y fatiga de noche y de dia, por no ser gravosos á ninguno de vosotros.
9 No porque no tuviésemos potestad, sino por daros en nosotros un dechado, para que nos imitaseis.
10 Porque aun estando con vosotros os denunciamos esto: Que si alguno no quisiere trabajar, tampoco coma.
11 Porque oimos que andan algunos entre vosotros fuera de órden, no trabajando en nada, sino ocupados en curiosear.
12 Y á los tales requerimos y rogamos por nuestro Señor Jesu-Cristo, que trabajando con reposo, coman su pan.
13 Y vosotros, hermanos, no os canseis de hacer bien.
14 Y si alguno no obedeciere á nuestra palabra por carta, notad al tal, y noos junteis con él, para que se avergüence.
15 Mas no lo tengais como á enemigo; sino amonestadle como á hermano.
16 Y el mismo Señor de paz os dé siempre paz en toda manera. El Señor [sea]
con todos vosotros.
17 Salud de mi mano, Pablo; que es [mi] signo en toda carta [mia.] Así escribo.
18 La gracia de nuestro Señor Jesu-Cristo [sea] con todos vosotros. Amen.
La segunda [epístola] los Tesalonicenses fué escrita de Atenas.
LA PRIMERA EPÍSTOLA DEL APÓSTOL SAN PABLO
Á
TIMOTÉO.
CAPITULO 1.
1 PABLO, apóstol de Jesu-Cristo por la ordenacion de Dios nuestro Salvador, y del Señor Jesu-Cristo, nuestra esperanza;
2 A Timotéo, verdadero hijo en la fé: Gracia, misericordia y paz de Dios nuestro Padre, y de Cristo Jesus nuestro Señor.
3 Como te rogué que te quedases en Efeso, cuando partí para Macedonia, para que requirieses á algunos que no enseñen diversa doctrina, 4 Ni presten atencion á fábulas y genealogías sin término, que ántesengendran cuestiones que la edificacion de Dios, que es por fé, [así teencargo ahora.]
5 Pues el fin del mandamiento es la caridad [nacida] de corazon limpio y debuena conciencia, y de fé no fingida:
6 De lo cual distrayéndose algunos, se apartaron á vanas platicas; 7 Queriendo ser doctores de la ley, sin entender ni lo que hablan, ni lo queafirman.
8 Sabemos empero que la ley [es] buena, si alguno usa de ella legítimamente; 9 Conociendo esto, que la ley no es puesta para el justo, sino para losinjustos, y para los desobedientes, para los impíos y pecadores, para losmalos y profanos, para los parricidas y matricidas, para los homicidas, 10 Para los fornicarios, para los sodomitas, para los ladrones de hombres,para los mentirosos y perjuros; y si hay alguna otra cosa contraria á la sanadoctrina,
11 Segun el Evangelio de la gloria del Dios bendito, el cual á mí me ha sido encargado.
12 Y doy gracias al que me fortificó, á Cristo Jesus nuestro Señor, de que me tuvo por fiel, poniéndome en el ministerio;
13 Habiendo sido ántes blasfemo, y perseguidor, é injuriador: mas fui recibido á misericordia, porque lo hice con ignorancia en incredulidad.
14 Mas la gracia de nuestro Señor fué más abundante con la fé y amor que es en Cristo Jesus.
15 Palabra fiel, y digna de ser recibida de todos: Que Cristo Jesus vino al mundo para salvar á los pecadores, de los cuales yo soy el primero; 16 Mas por esto fuí recibido á misericordia, para que Jesu-Cristo mostraseen mí el primero toda [su]
clemencia, para ejemplo de los que habian de creeren él para vida eterna.
17 Por tanto al Rey de siglos, inmortal, invisible, al solo sabio Dios,
[sea] honor y gloria por siglos de los siglos. Amen.
18 Este mandamiento, hijo Timotéo, te encargo, para que, conforme á las profecías pasadas de tí, milites por ellas buena milicia;
19 Manteniendo la fé y buena conciencia, la cual echando de sí algunos, hicieron naufragio en la fé:
20 De los cuales [son] Hymenéo y Alejandro, que entregué á Satanás, para que aprendan á no blasfemar.
CAPITULO 2.
1 AMONESTO, pues, ante todas cosas, que se hagan rogativas, oraciones, peticiones, hacimientos de gracias, por todos los hombres; 2 Por los reyes, y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad.
3 Porque esto [es] bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador: 4 El cual quiere que todos los hombres sean salvos, y que vengan al conocimiento de la verdad.
5 Porque [hay] un Dios; asimismo un Mediador entre Dios y los hombres, JesuCristo hombre;
6 El cual se dió á sí mismo [en] precio del rescate por todos, [para]
testimonio en sus tiempos:
7 De lo que yo soy puesto por predicador y apóstol, (digo verdad en Cristo, no miento;) doctor de los Gentiles en fidelidad y verdad.
8 Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos limpias, sin ira ni contienda.
9 Asimismo tambien las mujeres, ataviándose en hábito honesto, con vergüenzay modestia; no con cabellos encrespados, ú oro, ó perlas, ó vestidoscostosos,
10 Sino de buenas obras, como conviene á mujeres que profesan piedad.
11 La mujer aprenda en silencio, con toda sujecion.
12 Porque no permito á la mujer enseñar, ni tomar autoridad sobre el hombre,sino estar en silencio.
13 Porque Adam fué formado el primero; despues Eva.
14 Y Adam no fué engañado; sino la mujer, siendo seducida, vino á ser
[envuelta] en transgresion.
15 Empero se salvará engendrando hijos, si permaneciere en la fé y caridad, y santidad, y modestia.
CAPITULO 3.
1 PALABRA fiel: Si alguno apetece obispado, buena obra desea.
2 Conviene, pues, que el obispo sea irreprensible, marido de una [sola]
mujer, solícito, templado, compuesto, hospedador, apto para enseñar; 3 No amador del vino, no heridor, no codicioso de torpes ganancias, sino moderado; no litigioso, ajeno de avaricia:
4 Que gobierne bien su casa, que tenga sus hijos en sujecion con toda honestidad;
5 (Porque el que no sabe gobernar su casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?)
6 No un neófito, porque, inflándose no caiga en juicio del diablo.
7 Tambien conviene que tenga buen testimonio de los extraños; porque no caiga en afrenta y en lazo del diablo.
8 Los diáconos asimismo [deben ser] honestos, no bilingües, no dados a mucho vino, no amadores de torpes ganancias;
9 Que tengan el misterio de la fé con limpia conciencia.
10 Y estos tambien sean ántes probados; y así ministren, si fueren sincrímen.
11 Las mujeres asimismo honestas, no detractoras, templadas, fieles en todo.
12 Los diáconos sean maridos de una [sola] mujer, que gobiernen bien sus hijos y sus casas.
13 Porque los que bien ministraren, ganan para sí buen grado, y mucha confianza en la fé que [es] en Cristo Jesus.
14 Esto te escribo con esperanza que iré presto á tí:
15 Y si no fuere tan presto, para que sepas cómo te conviene conversar en lacasa de Dios, que es la iglesia del Dios vivo, columna y apoyo de la verdad.
16 Y sin contradiccion, grande es el misterio de la piedad: Dios ha sidomanifestado en carne; ha sido justificado con el Espíritu; ha sido visto delos ángeles; ha sido predicado á los Gentiles; ha sido creido en el mundo; hasido recibido en gloria.
CAPITULO 4.
1 EMPERO el Espíritu dice manifiestamente, que en los venideros tiemposalgunos apostatarán de la fe, escuchando á espíritus de error, y á doctrinasde demonios; 2 Que con hipocresía hablarán mentira, teniendo cauterizada la conciencia: 3 Que prohibirán casarse, [y mandarán] abstenerse de las viandas que Dioscrió para que con hacimiento de gracias participasen de ellas los fieles, ylos que han conocido la verdad.
4 Porque todo lo que Dios crió [es] bueno, y nada hay que desechar,tomándose con hacimiento de gracias: 5 Porque por la palabra de Dios, y por la oracion es santificado.
6 Si esto propusieres á los hermanos, serás buen ministro de Jesu-Cristo,criado en las palabras de la fé y de la buena doctrina, la cual hasalcanzado.
7 Mas las fábulas profanas y de viejas desecha y ejercítate para la piedad.
8 Porque el ejercicio corporal para poco es provechoso; mas la piedad paratodo aprovecha, pues tiene promesa de esta vida presente y de la venidera.
9 Palabra fiel [es] esta, y digna de ser recibida de todos.
10 Que por esto aun trabajamos y sufrimos oprobios, porque esperamos en elDios viviente, el cual es Salvador de todos los hombres, mayormente de losque creen.
11 Esto manda y enseña.
12 Ninguno tenga en poco tu juventud; pero sé ejemplo de los fieles enpalabra, en conversacion, en caridad, en espíritu, en fé, en limpieza.
13 Entretanto que voy, ocúpate en leer, en exhortar, en enseñar.
14 No descuides el don que está en tí, que te es dado por profecía con la imposicion de las manos del presbiterio.
15 Medita estas cosas; ocúpate en ellas; para que tu aprovechamiento sea manifiesto á todos.
16 Ten cuidado de tí mismo y de la doctrina; persiste en ello; pues haciendo esto, á tí mismo salvarás y á los que te oyeren.
CAPITULO 5.
1 NO reprendas al anciano, sino exhórta[le] como á padre: á los mas jóvenes, como á hermanos;
2 A las ancianas, como á madres; á las jovencitas, como á hermanas, con toda pureza.
3 Honra á las viudas que en verdad son viudas.
4 Pero si alguna viuda tuviere hijos, ó nietos, aprendan primero á gobernarsu casa piadosamente, y á recompensar á sus padres: porque esto es lo honestoy agradable delante de Dios.
5 Ahora la que en verdad es viuda y solitaria, espera en Dios, y esdiligente en suplicaciones y oraciones noche y dia.
6 Pero la que vive en delicias, viviendo está muerta.
7 Denuncia pues estas cosas, para que sean sin reprension.
8 Y si alguno no tiene cuidado de los suyos, y mayormente de los de su casa la fé negó, y es peor que un infiel.
9 La viuda sea puesta en [especial] clase no ménos que de sesenta años: que haya sido esposa de un [solo] marido;
10 Que tenga testimonio en buenas obras; si crió [bien sus] hijos; si haejercitado la hospitalidad; si ha lavado los piés de los santos; si hasocorrido á los afligidos; si ha seguido toda buena obra.
11 Pero viudas más jóvenes no admitas; porque despues de hacerse licenciosascontra Cristo, quieren casarse:
12 Condenadas ya, por haber falseado la primera fé.
13 Y aun tambien se acostumbran, [hechas] ociosas, á andar de casa en casa;y no solamente ociosas, sino tambien parleras y curiosas, hablando lo que noconviene.
14 Quiero, pues, que las que son jóvenes se casen, crien hijos, gobiernen lacasa; que ninguna ocasion den al adversario para maldecir.
15 Porque ya algunas han vuelto atrás en pos de Satanás.
16 Si algun fiel ó alguna fiel tiene viudas, manténgalas, y no sea gravadala iglesia; á fin de que haya lo suficiente para las que de verdad sonviudas.
17 Los ancianos que gobiernan bien, sean tenidos por dignos de doblada honra; mayormente los que trabajan en predicar y enseñar.
18 Porque la escritura dice: No embozarás al buey que trilla. Y: Digno [es]
el obrero de su jornal.
19 Contra el anciano no recibas acusacion sino con dos ó tres testigos.
20 A los que pecaren, repréndelos delante de todos, para que los otrostambien teman.
21 [Te] requiero delante de Dios y del Señor Jesu-Cristo, y de sus ángelesescogidos, que guardes estas cosas sin perjuicio de nadie, que nada hagasinclinándote á la una parte.
22 No impongas de ligero las manos á alguno, ni comuniques en pecados ajenos: consérvate en limpieza.
23 No bebas de aquí adelante agua, sino usa de un poco de vino por causa del estómago, y de tus contínuas enfermedades.
24 Los pecados de algunos hombres, ántes que vengan [ellos] á juicio, son manifiestos; mas á otros les vienen despues.
25 Asimismo las buenas obras ántes son manifiestas; y las que son de otra manera, no pueden esconderse.
CAPITULO 6.
1 TODOS los que están debajo del yugo de servidumbre, tengan á sus señorespor dignos de toda honra, porque no sea blasfemado el nombre del Señor y [su]doctrina.
2 Y los que tienen amos fieles, no [los] tengan en ménos, por ser [sus]hermanos; ántes sírvan[les] mejor, por cuanto son fieles y amados, [y]partícipes del beneficio. Esto enseña y exhorta.
3 Si alguno enseña otra cosa, y no asiente á las sanas palabras de nuestroSeñor Jesu-Cristo, y á la doctrina que es conforme á la piedad,
4 Es hinchado, nada sabe, y enloquece acerca de cuestiones y contiendas depalabras, de las cuales nacen envidias, pleitos, maledicencias, malassospechas,
5 Porfías de hombres corruptos de entendimiento, y privados de la verdad,que tienen la piedad por granjería: apártate de los tales.
6 Empero grande granjería es la piedad con contentamiento.
7 Porque nada hemos traido á este mundo, [y] sin duda nada podrémos sacar.
8 Así que teniendo sustento, y con qué cubrirnos, seamos contentos con esto.
9 Porque los que quieren enriquecerse, caen en tentacion y lazo, y en muchascodicias locas y dañosas, que hunden á los hombres en perdicion y muerte.
10 Porque el amor del dinero es la raíz de todos los males; el cualcodiciando algunos, se descaminaron de la fé, y fueron traspasados de muchosdolores.
11 Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas; y sigue la justicia, lapiedad, la fé, la caridad, la paciencia, la mansedumbre.
12 Pelea la buena batalla de la fé, echa mano de la vida eterna, á la cualasimismo eres llamado, habiendo hecho buena profesion delante de muchostestigos.
13 Te mando delante de Dios, que da vida á todas las cosas, y de JesuCristo, que testificó la buena profesion delante de Poncio Pilato, 14 Que guardes el mandamiento sin mácula, ni reprension, hasta la aparicion de nuestro Señor Jesu-Cristo;
15 La cual á su tiempo mostrará el Bienaventurado y solo Poderoso, Rey de reyes, y Señor de señores;
16 Quien solo tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible, á quienninguno de los hombres ha visto, ni puede ver: al cual [sea] la honra y elimperio sempiterno. Amen.
17 A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan laesperanza en la incertidumbre de las riquezas, sino en el Dios vivo, que nosda todas las cosas en abundancia de que gocemos: 18 Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, que con facilidad comuniquen:
19 Atesorando para sí buen fundamento para lo porvenir, que echen mano á la vida eterna.
20 Oh Timotéo, guarda lo que se te ha encomendado, evitando las profanas pláticas de vanas cosas, y los argumentos de la falsamente llamada ciencia: 21 La cual profesando algunos, fueron descaminados acerca de la fé. La gracia [sea] contigo. Amen.
La primera [epístola] á Timotéo fué escrita de Laodicéa, que es metrópoli de la Phrygia Pacaciana.
LA SEGUNDA EPÍSTOLA DEL APÓSTOL SAN PABLO
Á
TIMOTÉO.
CAPITULO 1.
1 PABLO, apóstol de Jesu-Cristo por la voluntad de Dios, segun la promesa de la vida, que es en Cristo Jesus,
2 A Timotéo, amado hijo, gracia, misericordia, [y] paz de Dios el Padre, y de Jesu-Cristo nuestro Señor.
3 Doy gracias á Dios, al cual sirvo desde mis mayores con limpia conciencia, de que sin cesar tengo memoria de tí en mis oraciones noche y dia; 4 Deseando verte, acordándome de tus lágrimas, para ser lleno de gozo; 5 Trayendo á la memoria la fé no fingida que [habia] en tí, la cual residióprimero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice; y estoy cierto que en títambien.
6 Por lo cual te aconsejo, que despiertes el don de Dios que está en tí por la imposicion de mis manos.
7 Porque no nos ha dado Dios el espíritu de temor, sino [el] de fortaleza, y de amor, y de templanza.
8 Por tanto no te avergüences del testimonio de nuestro Señor, ni de mí,preso [por amor] suyo; ántes se participante de los trabajos del Evangelio,segun la virtud de Dios, 9 Que nos salvó y llamó con vocacion santa, no conforme á nuestras obras,mas segun el intento suyo, y
[por la] gracia, la cual nos es dada en CristoJesus ántes de los tiempos de los siglos; 10 Mas ahora es manifestada por la aparicion de nuestro Salvador Jesu-Cristo, el cual quita la muerte, y sacó á la luz la vida y la inmortalidadpor el Evangelio;
11 Del cual yo soy puesto predicador, y apóstol, y maestro de los Gentiles.
12 Por lo cual asimismo padezco esto: mas no me avergüenzo; porque^ yo sé áquien he creido, y estoy cierto que es poderoso para guardar mi depósito paraaquel dia.
13 Reten la forma de las sanas palabras que de mí oiste, en la fé y amor que[es] en Cristo Jesus.
14 Guarda el buen depósito por el Espíritu Santo que habita en nosotros.
15 [Ya] sabes esto, que me han sido contrarios todos los que son en Asia; de los cuales son Figello, y Hermógenes.
16 Dé el Señor misericordia á la casa de Onesíforo; que muchas veces me refrigeró, y no se avergonzó de mi cadena:
17 Antes estando él en Roma, me buscó solícitamente, y [me] halló.
18 Déle el Señor que halle misericordia cerca del Señor en aquel dia. Ycuánto [nos] ayudó en Efeso, tú lo sabes mejor.
CAPITULO 2.
1 PUES tú, hijo mio, esfuérzate en la gracia que es en Cristo Jesus.
2 Y lo que has oido de mí entre muchos testigos, esto encarga á los hombresfieles que serán idóneos para enseñar tambien á otros.
3 Tú pues sufre trabajos como fiel soldado de Jesu-Cristo.
4 Ninguno que milita se embaraza en los negocios de la vida; á fin deagradar á aquel que lo tomó por soldado.
5 Y aun tambien el que lidia, no es coronado si no lidiare legítimamente.
6 El labrador para recibir los frutos, es menester que trabaje primero.
7 Considera lo que digo; y el Señor te dé entendimiento en todo.
8 Acuérdate que Jesu-Cristo, [el cual fué] de la simiente de David, resucitó de los muertos conforme á mi Evangelio;
9 En el que sufro trabajo, hasta las prisiones á modo de malhechor: mas la palabra de Dios no está presa.
10 Por tanto todo lo sufro por amor de los escogidos, para que ellos tambien consigan la salud que es en Cristo Jesus con gloria eterna.
11 [Es] palabra fiel: Que si somos muertos con él, tambien vivirémos con él: 12 Si sufrimos, tambien reinarémos con él. Si negáremos, él tambien nosnegará: 13 Si fuéremos infieles, él permanece fiel: no se puede negar á sí mismo.
14 Recuérda[les] esto, protestando delante del Señor que no contiendan en palabras, [lo cual] para nada aprovecha, [ántes] trastorna á los oyentes.
15 Procura con diligencia presentarte á Dios aprobado, [como] obrero que no tiene de que avergonzarse, que traza bien la palabra de verdad.
16 Mas evita profanas [y] vanas parlerías; porque muy adelante irán en la impiedad.
17 Y la palabra de ellos carcomerá como gangrena; de los cuales es Hymenéo, y Fileto;
18 Que se han descaminado de la verdad, diciendo que la resurreccion es ya hecha, y trastornan la fé de algunos.
19 Pero el fundamento de Dios está firme, teniendo este sello: Conoce elSeñor los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca elnombre de Cristo.
20 Mas en una casa grande, no solamente hay vasos de oro y de plata, sinotambien de madera y de barro; y asimismo unos para honra, y otros paradeshonra.
21 Así que si alguno se limpiare de estas cosas, será vaso para honra,santificado, y útil para los usos del Señor, [y] aparejado para toda buenaobra.
22 Huye tambien los deseos juveniles; y sigue la justicia, la fé, la caridad, la paz, con los que invocan al Señor de puro corazon.
23 Empero las cuestiones necias y sin sabiduría desecha, sabiendo que engendran contiendas.
21 Que el siervo del Señor no debe ser litigioso, sino manso para con todos, apto para enseñar, sufrido;
25 Que con mansedumbre corrija á los que se oponen; si quizá Dios les dé que se arrepientan para conocer la verdad,
26 Y se zafen del lazo del diablo, en que están cautivos á voluntad de él.
CAPITULO 3.
1 ESTO tambien sepas, que en los postreros dias vendrán tiempos peligrosos: 2 Que habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, detractores, desobedientes á los padres, ingratos, sin santidad, 3 Sin afecto, desleales, calumniadores, destemplados, crueles, aborrecedores de lo bueno,
4 Traidores, arrebatados, hinchados, amadores de los deleites más que de Dios;
5 Teniendo apariencia de piedad, mas habiendo negado la eficacia de ella: y á estos evita.
6 Porque de estos son los que se