Confort felino
Entretejo ochos
entre tus piernas de pana
y empujo suavemente mis mejillas contra tus tobillos,
lengua espinosa que hurga,
y pestafieo con el rostro descubierto
en la distancia vertical,
calculando sacudidas,
la medida del resorte versus un salto alto,
o arafio hacia arriba
hasta alcanzar la maxima amortiguacion de latidos
para descansar tras acariciarte con mis patas
una vez, dos: un epflogo despreocupado,
displicente satisfaccion,
y me acomodo en el ascenso y descenso
de un suefio calido y elegante