![Free-eBooks.net](/resources/img/logo-nfe.png)
![All New Design](/resources/img/allnew.png)
Es imposible, esta solo, y nos estaprohibido el introducir a nadie.
EL ABAD.
Yo lo tomo sobre mi … es precisoque yo le vea.
HERMAN.
?No le habeis ya visto esta tarde?
EL ABAD.
Herman, yo te lo ordeno, ves allamar a la puerta y a prevenir alconde acerca de mi visita.
HERMAN.
Nosotros no nos atrevemos.
EL ABAD.
iY bien! yo mismo ire a anunciarme.
MANUEL.
Mi respetable padre, deteneos, oslo suplico.
EL ABAD.
?Porque?
MANUEL.
Esperad un momento, y yo meesplicare en otro parage.
[Se van.]
ESCENA IV.
[El interior de la torre.]